Consejos para conducir de noche de forma segura
De noche las condiciones generales de circulación y la visibilidad se ven ampliamente reducidas. Descubre esta serie de consejos y reglas para conducir de forma más segura.
06/02/2018
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Tanto los conductores más novatos como los que tienen una gran experiencia al volante, tienen que ser conscientes de lo que cambian las condiciones generales de circulación al conducir de noche.
El 90% de la información del tráfico la recibimos por la vista y, de noche, nuestra percepción visual está claramente afectada: menos visibilidad (problemático si vamos por un camino desconocido); mayor número de destellos, luces y posibilidades de distraerse; mayor probabilidad de personas conduciendo con los efectos del alcohol o la somnolencia...
En definitiva, si de día hay que estar atento a la calzada, de noche hay que tener mil ojos bien dispuestos para estar pendientes de la circulación. Es más, ¿sabías que el 42% de los accidentes se produce durante la noche?
Para que la seguridad en vuestro vehículo siga siendo una prioridad, os mostramos diez reglas básicas que debes seguir para conducir de noche totalmente seguro.
Respeta la velocidad y mantén la distancia de seguridad
Es posible que de noche la carretera esté más despejada, no haya tanto tráfico y pensemos que se puede acelerar más al haber más espacio. Grave error.
El campo de iluminación por la noche engaña y puede aparecer cualquier persona u obstáculo en un instante. ¿Y qué va a ocurrir? Si vamos a gran velocidad no tendremos el tiempo necesario para reaccionar. La precaución es la mejor medida de seguridad.
Mantén la distancia de seguridad. La posibilidad de que un conductor se quede dormido en un semáforo o incluso que esté bajo los efectos del alcohol, obliga a ponerse siempre en lo peor pese a que se traten de tres casos aislados y que no son nada frecuentes. Si entre ambos vehículos hay distancia suficiente para no colisionar, podrás impedir un accidente.
Sé más conscientes de tus limitaciones
Problemas oculares como la miopía producen que de noche veamos peor que de día incluso si usamos gafas o lentes de contacto. Si es tu caso, así como otras situaciones cotidianas pero que nos limitan (si sales y haces cenas copiosas, eres fumador o has tomado medicación, etc.) ¡atento porque tus facultades puedes verse afectadas!
Mayor vigilancia de los espejos
Presta más atención de la habitual a los espejos. Cualquier persona que tenga tendencia a despistarse (niños, ancianos, o incluso animales de compañía) se puede desorientar y surgir “de la nada”. Debemos estar atentos a las luces de los demás vehículos para ser conscientes de su presencia lo antes posible.
¿Cómo actuar ante deslumbramientos?
En estos casos, aminora el ritmo, acércate a la línea derecha de tu carril y gira la cabeza hacia ese sentido. Si el deslumbramiento es muy intenso, cierra el ojo izquierdo lo antes posible para dejar de ver cuanto antes la luz de los faros del coche contrario.
¿Hay que guiarse de la luz de los coches que van delante?
No, ya que de noche las formas engañan y lo que parece recto en una carretera secundaria puede ser todo lo contrario, que existan desniveles, cambios de rasante... fíate solo de lo que ven tus ojos gracias a la luz de tu coche.
Permanece despierto
Pese a que existen trucos que nos ayudan a evitar el sueño repentino como bajar las ventanillas, escuchar música o la radio y hablar con los demás pasajeros, la mejor forma de asegurarnos que no nos vamos a dormir al volante es que al mínimo indicio de cansancio paremos y descansemos. En caso de que así sea acude a un área de descanso y echa una cabezada que te permita reponer fuerzas o, si cuentas con un copiloto que se encuentre más despierto, deja que sea él quien conduzca. La cafeína ayuda, pero no siempre llegan sus efectos al tiempo adecuado y no conviene abusar de ella, más aún si viene en forma de bebida energética.
Cómo actuar con la lluvia si conducimos de noche
Tus mayores aliados en este viaje van a ser los limpiaparabrisas: valora cuál es la velocidad adecuada para tener una buena visibilidad; en caso de barro o polvo en los faros, debemos bajarnos inmediatamente y limpiarlos ya que pueden reducir la visibilidad en unos porcentajes muy altos. Si percibes que algo en ellos no va bien, no olvides pasarte por tu taller de confianza al día siguiente para que te hagan una revisión de tu vehículo oportuna. ¡No juegues con tu seguridad!
Revisa las luces antes de salir
Los faros del coche tienen que estar perfectamente reglados ya que van a ser los que nos permitan ver y ser vistos. Recuerda encender las luces de cruce entre la puesta y la salida del sol. Cuando las condiciones de la vía y la circulación te permitan encender las de largo alcance, hazlo para cerciorarte del camino o de los demás vehículos, siempre con precaución de no cegarles con la luz.
Disminuir la luz del interior del coche
En los coches que tienen diversas luces en el interior del vehículo, es mejor bajar la intensidad y que sea lo más tenue para ver mejor lo que hay en el exterior del vehículo. Prescinde de cualquier foco interior innecesario.
Paradas obligatorias
En viajes por carretera largos, descansa cada dos horas. De noche, se recomienda ser mucho más precavido y hacer caso de las señales que nos manda nuestro cuerpo que indiquen cansancio.
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