Repuestos o cambio de piezas de coche: ¿por km o años?

Los cambios de piezas del coche se suelen plantear cuando se prevé que se desgastan, pero, ¿mejor llevar este cálculo por km o por años?

07/05/2019

Los conductores más preocupados por el cuidado, la seguridad, y el mantenimiento de su vehículo suelen plantear como mínimo dos revisiones anuales en el taller mecánico: una destinada a preparar la inspección técnica (la pre-ITV) y otra que sirva para detectar o para cambiar las piezas del coche que presenten desgaste.

Esta última revisión se suele hacer con la idea de que alguna pieza presenta o está a punto de desgastarse, pero ¿cómo llevar a cabo el control de esta cita con el taller: mediante kilómetros recorridos o mediante años pasados desde el anterior recambio?

Cómo determinar la revisión o cambio de piezas de coche

Como ocurre con otros factores que afectan al vehículo, el nivel de desgaste de una pieza lo determinará dos factores fundamentales:

Lo que indique el manual del fabricante: primera y primordial pista. Ni lo que leamos, ni lo que intuyamos más allá de lo que nos diga un profesional. La primera indicación sobre si debemos tener en cuenta el desgaste de una pieza por tiempo o por recorrido es lo que determine el fabricante. Así, piezas como el recambio de la correa de transmisión normalmente se indicará en kilómetros sin causar mayor duda, mientras que otras dependerá de las calidades de la pieza, de su integración dentro del sistema y, sobre todo de…
El tipo de conducción que habituemos: el cambio de piezas de coche no responde a una fecha de caducidad cerrada como ocurre con ciertos alimentos. Según cuidemos y según habituemos a las piezas a ciertas rutinas, su desgaste será mayor o menor. Por ejemplo, no es lo mismo cuándo tengamos que acudir a un taller mecánico para cambio de frenos en Valencia, donde habituamos a desgastar más la pieza por su uso urbano, que cuando debemos acudir a un cambio de frenos en Teruel, donde se presupone un uso menor en atascos o desaceleraciones.

Momentos clave en los que plantear la revisión o cambio de piezas de coche

Atendiendo a estos dos factores, podremos hacernos una idea predeterminada de cuándo acudir al taller de confianza para el mantenimiento y recambio de las piezas del coche. No obstante, existen fechas clave en las que en caso de duda o no haberlas planteado de antemano, podemos aumentar la atención a este factor. Son fechas que los propios fabricantes de automóviles y los talleres mecánicos suelen hacer coincidir para no tener que preocuparnos cada X tiempo o kilómetros por el recambio de piezas concretas:

Cada año: la pre-ITV que no solo te garantiza pasar la inspección, sino también tener un recordatorio eficaz del momento de recambio de cada pieza y su estado de desgaste. Por otra parte, se recomienda una segunda revisión anual para piezas que sí o sí deberían recambiarse/revisarse cada año, como es el caso de los filtros, fluidos, escobillas y el sistema de climatización.
25.000 km: es el indicativo de que las pastillas o discos de freno pueden comenzar a presentar desgaste.
50.000 km: es la fecha media marcada para recambios como el juego de luces, las bujías y los calentadores.
75.000 km: puede que a esta fecha los amortiguadores ya no te den de sí todo lo que deberían. Recuerda cambiar el juego al completo o, al menos, los del mismo eje. Los frenos de tambor son otras piezas a las que echarle el ojo llegados a este kilometraje.
4 años: es el momento en el que de media una batería se agota.
100.000 km: las calidades de la correa entre otras piezas del kit de distribución, determinan que soporte más o menos kilometrajes, pero dada la importancia de evitar una avería del sistema de distribución, convendría no arriesgarse llegado este punto.

La importancia del taller mecánico en la revisión o cambio de piezas de coche

A los descritos, podríamos sumar un último factor que determina que se pueda postergar o anticipar el momento del cambio de piezas del coche: se trata de la calidad y profesionalidad del taller mecánico elegido.

Tras la compra del vehículo, es el fabricante (y así lo transmite a través del manual) el que en función de las calidades y de las piezas incorporadas, determina el momento máximo en el que una pieza se debe revisar.

Una vez este vehículo pasa por el taller y se realiza el primer recambio, esta responsabilidad deja de ser exclusividad de la marca para formar parte de la del mecánico. Por ello, debemos asegurarnos que el taller por el que pasa nuestro coche use solo piezas homologadas, de marcas de calidad y nos ofrezca garantías de uso.

No acudir a un taller que cumpla con estos tres principios, supone que no sepamos cuándo una pieza se debería cambiar o el estado original de ésta, exponiéndonos a un recambio más temprano de lo necesario en el mejor caso, o a una avería en el peor.

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