Cómo usar correctamente las sillitas de bebés para coches
Las sillitas de bebés para coches son un sistema de seguridad que además de obligatorio, es muy necesario para proteger a nuestros seres queridos. Aprende a usarlo correctamente.
19/01/2017
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El uso de sistemas de retención infantil (SRI), es decir, las sillitas de bebés para coches, es obligatorio en España desde el 1 de octubre de 2015. Su uso inadecuado o directamente no usarla conlleva por ello una sanción calificada como grave, lo que conlleva multas de hasta 200 euros y la pérdida inmediata de 3 puntos del carnet.
Esta es la parte “fría” del uso de sillitas de bebés para coches que, a partir de ahora en este artículo, vamos a obviar, ya que desde SPG Talleres consideramos que el uso de ésta y otras medidas de seguridad que nos protegen a nosotros y a nuestros seres queridos, jamás deben estar sujetas únicamente a la legalidad, sino al sentido común y al uso responsable de nuestro vehículo.
Por estas razones, a continuación os ayudaremos con un tema que entendemos que según la circunstancia, puede llevar a confusiones: cómo usar correctamente las sillitas de bebés para coches cuando viajamos con niños.
Clasificación de las sillitas de bebés para coches
La cuestión inicial a la hora de abordar la compra del asiento infantil para el coche es aparentemente sencilla: ¿qué silla portabebés debo comprar?
Como todo lo que constituye una obligación legal (y moral), esta cuestión está homologada y existe un rango o escala de la silla adecuada para cada edad y/o peso. Esta cuestión abarca desde los recién nacidos hasta los 12 años, por lo que no hablamos de portabebés en el sentido estricto, sino de su nombre oficial: sistemas de retención infantil (SRI), y su clasificación es la siguiente:
- Grupo 0: hasta 10 kg, recién nacidos hasta 1 año
- Grupo 0+: hasta 13 kg, desde recién nacidos hasta los 18 meses
- Grupo 1: de 9 a 18 kg, desde 1 año hasta los 4 años aproximadamente
- Grupo 2: de 15 a 25 kg, desde los 3 hasta los 6 años aproximadamente
- Grupo 3: de 22 a 36 kg, desde los 5 hasta los 12 años aproximadamente
Una vez se ha superado la edad de los 12 años o si nuestro hijo ha superado los 135 centímetros de estatura, pasamos de la obligación del uso del sistema de retención infantil a la obligación del uso del cinturón de seguridad.
Tipos de sillitas de bebés para coches
Hemos comenzado con la clasificación homologada, y por tanto cuyos estándares debemos seguir sí o sí, pero dentro de estas reglas comunes encontramos distintos tipos de sillitas portabebés o infantiles que se adaptan a la necesidad de los padres. Son 4:
- Capazo,
- Silla con arnés
- Elevador con respaldo
- Alzador
Así, por ejemplo, nos encontramos que para un SRI del grupo 0, conviene la compra de una silla o capazo, ya que se suelen tratar de estructuras sencillas y su elección depende de dónde queramos situarlos (los capazos sólo pueden ir en los asientos traseros).
En el caso del 0+ para adelante, no existe la opción capazo, que a priori es la más sencilla, y a medida que nuestro hijo se acerca al límite de los 12 años, la opción alzador es la que suele resultar más cómoda para un uso práctico.
Otra cuestión es el anclaje, que hasta el uso del grupo 2 será basado mediante arneses colocados en 5 puntos, y que en el caso de las sillas, puede usarse mediante el cinturón o el anclaje ISOFIX, el más útil pero que no todos los vehículos lo traen de serie (puede ser una buena razón para elegir modelo familiar si cambiamos de coche).
Consejos a la hora de usar las sillitas de bebés para coches
Lo primero es tener en cuenta que hablamos de seguridad, no de obligación por mucho que la haya. Por ello, jamás debemos pensar en la compra de una sillita para bebes para el coche como un quitamultas: elige el modelo exacto que necesita tu hijo, no por tu comodidad ni mucho menos por tu bolsillo.
- Preferentemente coloca la silla en el asiento trasero: mucho mejor si es en la parte central
- Los capazos en sentido contrario a la conducción: y con el airbag desconectado si los situamos en el asiento del copiloto. En el caso de las sillas, siempre que se pueda (que suele coincidir con hasta los 4 años), también debemos llevarlas al revés.
- No temas que se te quede chico: el sistema SRI solo funciona correctamente si se usa en su rango correcto. No caigas en el error de comprar uno de una talla superior a la espera de que te dure más.
- Pregunta: en los puntos de venta de asientos portabebés, tal como ocurre en tu taller mecánico de confianza, el personal está altamente cualificado para atender toda demanda de qué sistema usar, qué anclaje y qué talla según para que niño lo usemos. No temas consultar a especialistas: es un tema que lo merece.
- Sentido común: podemos ser muy metódicos en la compra y adquirir la silla homologada para bebés correcta, pero también debemos tener en cuenta cuándo toca cambiarla. Si vemos que a nuestro hijo los brazos y piernas le sobresalen profusamente, la cabeza no queda correctamente sujeta o le resulta incómoda, claramente debemos cambiar de rango, aunque peso, edad o incluso altura correspondan con el recomendado.
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