¿Sabes interpretar correctamente los testigos de tu coche?
Conoce cómo interpretar los testigos de tu coche para saber la gravedad de la situación y qué hacer en cada momento.
28/03/2018
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En caso de algún problema o alguna avería, los testigos del coche se iluminan para avisarnos de que algo no funciona correctamente. Es cierto que cada coche es un mundo y que cada marca establece sus propios sistemas, no obstante, las señales luminosas del panel de instrumentación que corresponden a diferentes indicadores son en una gran mayoría extensibles a cualquier coche.
Es fundamental conocer el significado del color de la luz del testigo que se ilumina: en función de la gravedad del problema será de un color u otro. Las alertas en color rojo son las más graves, por lo que en ese caso es conveniente parar el coche inmediatamente y avisar a asistencia; si la iluminación es en color amarillo o ámbar, no es necesaria inmovilización del vehículo, aunque es oportuno parar en cuanto se pueda y consultarlo con un taller profesional; por último, los testigos en otros colores como azul, verde o blanco no informan de ningún tipo de avería, simplemente avisan de que las luces o cualquier otro sistema está activo o se está utilizando.
Cómo interpretar los testigos del coche: 12 indicadores básicos
- Presión o nivel del aceite
Si este testigo se ilumina en color rojo, es posible que la presión del aceite sea inferior al mínimo necesario para que el motor esté lubricado. No es una buena señal. Significa que apenas hay aceite en el cárter, lo que puede ocasionar severos problemas en el motor.
- Temperatura líquido refrigerante
Cuando el líquido refrigerante alcanza una temperatura por encima de lo recomendado, su nivel es bajo o directamente no hay, este testigo siempre se enciende. Si es un problema de temperatura, solo será necesario parar y dejar que el motor se enfríe.
- Fallo en el alternador o la batería
Este testigo acostumbra a iluminarse en algunos coches sin necesidad de arrancar el motor. Si encendemos el vehículo y persiste el problema, es posible que el alternador presente algún fallo por lo que no es capaz de cargar la batería o dar energía a algunos de los sistemas del coche. No es aconsejable pasar por alto este indicador: la batería podría descargarse complemente e incluso el coche podría pararse en marcha.
- Freno de mano y frenos
Si el freno de mano está puesto, este testigo se enciende. Según el coche puede ser un icono de exclamación o una ‘P’. También puede iluminarse si el líquido de frenos tiene un nivel bajo. En ese caso, el tacto del pedal será diferente, así que es necesario tener un especial cuidado en el momento de detener el vehículo para evitar fallos en el freno.
- Puertas
Este testigo informa si alguna de las puertas, el capó o el maletero están abiertos. Es uno de los más fáciles de interpretar e incluso en algunos modelos se señaliza la puerta que está abierta. Nada más cerrarla, el testigo deja de aparecer.
- Airbag
Si alguno de los airbags no está funcionando correctamente, este testigo se ilumina. En algunos coches más antiguos hay un testigo para cada airbag, que a decir verdad es una ventaja porque en ocasiones conviene llevar desactivado alguno de ellos, como cuando hay un sistema de retención infantil.
- Cinturón
Este testigo puede iluminarse de color rojo, aunque no está avisando de una avería. Lo hace cuando alguno de los pasajeros no lleva el cinturón de seguridad. Cuando se supera cierta velocidad, se añade una señal acústica que insta a ponerse el cinturón.
- ABS
El indicador correspondiente al sistema antibloqueo de frenos se ilumina cuando este no funciona correctamente. En ese caso, también es posible que junto a este testigo se encienda el del control de estabilidad, pues funciona con la ayuda del ABS. El conductor podrá seguir circulando, aunque no podrá hacer uso de una frenada de emergencia en caso de necesitarla, lo que es peligro destacable.
- Precalentamiento del motor
El testigo con forma de resistencia informa de un precalentamiento del motor. Es posible que aparezca al poner el contacto, lo que nos obligará a esperar a que se apague para arrancar el motor. Si circulando comienza a parpadear podría significar un fallo en el control del motor. Lo más indicado entonces sería parar inmediatamente.
- Presión en los neumáticos
Este indicador se ha introducido de modo obligado en los coches durante los últimos años. Nos avisa de una presión incorrecta en los neumáticos. Si se ilumina este testigo, lo más recomendable es parar, comprobar la rueda afectada e inflarla hasta que alcance la presión recomendada por el fabricante.
- Combustible
Hasta el conductor menos ávido es capaz de interpretar este testigo: se ilumina cuando el combustible alcanza un nivel bajo. Será necesario repostar cuanto antes.
- Líquido limpiaparabrisas
También es un indicador que no señala avería ni un mal funcionamiento. Este testigo informa cuando el coche se ha quedado sin líquido de limpiaparabrisas. Deberá llenarse para garantizar en todo momento una visibilidad óptima.
Saber interpretar los testigos de tu coche es importante, sin embargo, cuando se enciendan, debemos actuar con calma para tomar la solución más acertada, y no la más precipitada. Y, ante todo, evitar riesgos innecesarios realizando un buen mantenimiento en tu coche.
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