Alergia y conducción: ¿Puedo usar mi vehículo si tomo antihistamínicos?
Con la primavera llega el buen tiempo, pero también las temidas alergias. Este año vienen con fuerza… ¿Puedo usar mi vehículo tomando antihistamínicos?
26/03/2019
Compartir en redes sociales
Probablemente si has llegado hasta este artículo, o eres muy curioso (lo cual nos parece genial), o eres uno de los aproximadamente 16 millones de españoles que sufren algún tipo de alergia primaveral (el 30% de la población). Si entras dentro de este segundo grupo, habrás notado que la medicación apropiada para paliar los efectos de la alergia cuenta con ciertos efectos secundarios. ¿Está entre ellos la imposibilidad de usar el vehículo si se toma antihistamínicos?
Qué ocurre con la toma de antihistamínicos y cuáles son sus efectos secundarios
Lo primero es saber con exactitud a qué efectos secundarios no enfrentamos si decidimos ponernos al volante tras tomar medicamentos para la alergia, y a partir de ahí, conocer si es recomendado, imprudente o directamente impensable conducir tras consumir antihistamínicos.
Los antihistamínicos actúan en el cuerpo evitando que se produzca la histamina, que es la sustancia que nuestro organismo genera por sí mismo para combatir lo que cree un ataque al sistema inmunológico (presencia de polen, gramíneas, etc.). Esta sustancia reacciona produciendo los síntomas propios de una alergia (irritación, picores, estornudos, segregaciones abundantes, etc.), por lo que, para evitar estos inconvenientes, se nos recetan los antihistamínicos.
¿Son todos los antihistamínicos iguales? No. Existen cuatro tipos de histaminas, calificadas como H1, H2, H3 y H4. Las más frecuentes son la H1, que es la que manifiesta las molestias antes descritas. Las H2 se relacionan más con problemas gástricos, la H3 con el sistema nervioso central y la H4 principalmente en el sistema circulatorio.
Así, los medicamentos comúnmente recetados para las alergias primaverales corresponden al tipo H1, cuyos efectos consisten en sedar a nuestro propio organismo para que “pase por alto” la creación de este tipo de histamina.
Conducción y uso de antihistamínicos: ¿es buena combinación?
Antes de dar una respuesta, debemos indicar que, ante el consumo de cualquier medicamento, debemos estar atentos tanto a sus efectos secundarios como a las recomendaciones médicas indicadas en su prospecto.
Una vez dicho esto, notaremos que para la gran mayoría de los mencionados antihistamínicos H1, se nos recomendará no usar el vehículo bajo sus efectos, ya que producen somnolencia.
Para que nos podamos hacer una idea de la importancia de seguir esta recomendación, algunos de estos antihistamínicos producen peores efectos secundarios que el consumo de alcohol, siendo nada más y nada menos el consumo de medicamentos con contraindicaciones, el 5% del total de causas de accidentes de tráfico.
¿Qué hacer si debo conducir y tomar medicamentos contra la alergia?
Ya sabemos los efectos adversos del consumo de antihistamínicos y la conducción. Ahora bien, no por ello los más de 16 millones de españoles con alergias asociadas a la primavera deben quedarse aislados o encerrados en casa a la espera de que llegue el mes de julio. En el caso de tener que conducir bajo esta medicación, lo más recomendable es ponerlo en conocimiento del médico, el cual lo podrá tener en cuenta a la hora de recetarte lo más adecuado a tus hábitos.
Existen para ello antihistamínicos H1 de segunda y hasta tercera generación, los cuales se han diseñado para reducir al mínimo la somnolencia y con ello los efectos contraindicados para la conducción.
Recomendaciones a la hora de conducir con alergia
Hemos visto lo recomendado de dejar aparcado el coche si tomamos antihistamínicos H1 pero, ¿y si suspendemos la medicación mientras tengamos que conducir? La respuesta es que puede ser mucho peor “el remedio que la enfermedad”, ya que conducir bajo los efectos de una alergia es aún peor que conducir bajo los efectos de esta medicación.
Conducir con alergia puede suponernos lagrimeo constante, ataque pronunciado de estornudos que nos haga perder momentáneamente la visibilidad, irritaciones y picores que reducen la concentración entre solo algunos síntomas incompatibles con ir al volante. Además, más de la mitad de los alérgicos sufren alteraciones del sueño provocadas por los síntomas, lo cual acucia sin la necesidad de tomar medicamentos, los efectos de la somnolencia diurna.
Por ello, es preferible conducir responsablemente y con conciencia bajo los efectos de los antihistamínicos que necesitarlos y no tomarlos.
Otras recomendaciones para alérgicos al volante serían:
- Si puedes planificar tus viajes, revisa los niveles de polen en tu ciudad para desplazarte en horas de baja polinización, así como evitando viajar a primera hora de la mañana y a última de la tarde (horas de máxima concentración de polen)
- Visita tu taller mecánico más cercano para que te instalen el filtro HEPA (High Efficiency Particle Arresting), el más eficaz para evitar que el polen se introduzca en el coche.
- Usa gafas de sol, ya que reducen el picor y lagrimeo actuando de pantalla protectora ante la presencia de polen.
- No bajes las ventanillas, ya que permitirás la entrada de alérgenos.
- Limita el uso del aire acondicionado, incluso si cuentas con filtro HEPA, ya que es otro foco de entrada para el polen.
Volver al listado